¡Hola! Hoy te escribo desde España. Estoy en un viaje que anhelaba desde hace un par de años, aunque se dio de manera diferente a lo que había planeado originalmente antes de la pandemia, finalmente estoy aquí.
Me siento muy feliz gozando con mi familia de la cultura y gastronomía de estas tierras. En todo momento he sentido la presencia de mis ángeles guiando mi camino, en el proceso del plan tuve que tomar algunas decisiones de lugares a donde ir antes de que mi viaje terminara, por eso hoy quiero hablarte de un llamado que tuvo mi alma:
La montaña de Monserrat
Mi familia regresa a México, pero todo se alineó para que mi viaje continuara ahora con unas amigas que igualmente sienten ese llamado, así que juntas descubriremos lo que este lugar sagrado tiene para nosotras.
Esta montaña es uno de los chakras de la tierra, es la energía del dragón. Tiene a su alrededor historias desde que se cree que ahí entre sus rocas se encuentra el santo grial, que de igual forma se han observado muchos avistamientos extraterrestres y que su energía lleva a un portal divino.
Algunos estudios afirman que Montserrat es una montaña hueca y que en su interior hay un lago subterráneo. Y es allí donde estaría conservado el santo grial que tanto ansiaban los nazis, que querían conseguir la fuerza que mitológicamente contiene para convertirse en invencibles.
Hay quienes hablan de que en la montaña hay puertas que conectan las distintas dimensiones y que hay una conexión directa entre Agharta -el reino subterráneo de los dioses- y Montserrat, y quienes creen en esto dicen que la energía que mana de la montaña mágica procede de este mundo intraterrestre. Según la leyenda de las puertas interdimensionales, este portal de conexión entre mundos fue creado por antiguos habitantes de Atlántida, la isla mítica desaparecida en extrañas circunstancias.
Ya te imaginarás el sentimiento que me da estar ahí, meditar y seguir aprendiendo de lugares mágicos llenos de energía divina, hace que mi alma siga nutriéndose para entender más el sentido de la vida.
Cuéntame, ¿Has sentido en algún lugar una energía intensa? Espero puedas comentarme, me gustaría leer tu experiencia.
Te envío muchas bendiciones.
Con cariño, Claudia.
